Dios jamás te dará la espalda

La hija de Jairo y la mujer que tocó el manto de Jesús (Marcos 5:21-43)

"Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía, dijo al principal de la sinagoga: No temas, cree solamente". (Marcos 5:36)

Contexto: Jairo (el principal de la sinagoga) acababa de recibir una terrible noticia: Su hija había muerto; por esto, la multitud comenzó a persuadir a Jairo para que deje de insistir a Jesús.

Jesús no pasó por inadvertida la situación que estaba atravesando Jairo. Como dijimos, la intención de Jesús era elevar la fe de Jairo a nuevos niveles; sin embargo, durante este proceso no lo dejó solo. Se dirigió a él y lo animó diciendo: “No temas, cree solamente”.

Notemos que Jesús no se dirigió a las multitudes para reprenderlos, sino que se dirigió a Jairo para animarlo. Es decir, la multitud y su lamentable actuar eran una herramienta de Dios para poder fortalecer la fe de Jairo. Dios se había apiadado de Jairo y comenzaba a trabajar en él. A pesar de la condición de Jairo (colega de los fariseos y los herodianos quienes querían destruir a Jesús), Jairo buscó a Jesús y Jesús no le dio la espalda.

La salvación es por gracia divina y no por obras: “…cree solamente”. Jairo se acercó a Jesús porque creyó.

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. (Juan 3:16)

Oración:

Amado Señor gracias otra vez, porque inmerecidamente me amas, me sostienes en tus brazos y me animas a seguirte. El día de hoy renuevo mis fuerzas, mi compromiso, mi fe en ti Señor. ¡Gloria a Dios en la tierra en las alturas!